Las Causas de la enfermedad de Alzheimer

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La enfermedad de Alzheimer es uno de una serie de trastornos cerebrales que se agrupan bajo el término general de la demencia, un término usado para describir un trastorno cerebral que involucra la pérdida progresiva de la función cerebral. El Alzheimer es una enfermedad degenerativa de la terminal e incurable que presenta un enorme desafío médico y afecta a más de 26 millones de personas en todo el mundo. El número de afectados aumentará, sin duda, en las próximas décadas con el aumento de los costos médicos y sociales.

La enfermedad de Alzheimer fue nombrado después de que el psiquiatra alemán Alois Alzheimer en 1906, quien describió la enfermedad y sus síntomas. Las causas de la enfermedad de Alzheimer son todavía no conocen completamente, pero que implica una compleja interacción de factores de riesgo genéticos, ambientales y de estilo de vida.

Factores tales como una dieta bien balanceada y el ejercicio físico y mental regular puede reducir el riesgo de desarrollar Alzheimer. Los síntomas fisiológicos de la enfermedad son que los depósitos de proteínas, llamados placas amiloides y los ovillos de tau, aparecen en el cerebro y se extienden gradualmente a través del cerebro, particularmente en la corteza y el hipocampo. Al mismo tiempo, las concentraciones de transmisores químicos esenciales en el cerebro, tales como la acetilcolina, se reducen y muchos de los vasos sanguíneos en el cerebro también están dañados.

La enfermedad de Alzheimer puede tener un inicio muy gradual, y es difícil de diagnosticar ya que sus síntomas pueden ser compartidos por un número de otras condiciones de la edad y relacionados con el estrés. Los primeros síntomas pueden ser sutiles, pero incluir problemas con la memoria, falta de juicio y dificultad para realizar las tareas cotidianas, problemas con el lenguaje, desorientación en el tiempo y lugar y la dificultad con el pensamiento abstracto. Estos síntomas pueden ser combinados con los cambios de humor o comportamiento, en la personalidad y con la pérdida de la iniciativa y la depresión general, ansiedad y problemas de sueño.

Ha habido una variedad de pruebas de diagnóstico elaborados en los últimos años, pero no hay una sola prueba de que es fiable en todos los casos. La mayoría de los diagnósticos se realizan mediante una combinación de pruebas cognitivas y pruebas neuropsicológicas, así como escáneres cerebrales cuando sea posible. Los exámenes utilizados rutinariamente en el pasado han sido criticadas por ser demasiado fácil y no poder diagnosticar la enfermedad en las primeras etapas, cuando el tratamiento disponible podría tener más posibilidades de éxito, no en la producción de una cura, sino en la reducción de la velocidad de la aparición y gravedad de la síntomas. Varias terapias están disponibles para el tratamiento de los enfermos, como los métodos psicológicos, terapia de arte, musicoterapia y juegos que juegan, y mucho beneficio puede ser obtenido a partir de grupos que fomentan la reminiscencia como una manera de reducir la depresión y mantener vínculos sociales el mayor tiempo posible.

A medida que la enfermedad progresa los síntomas pueden incluir confusión, cambios de humor y la incapacidad de comunicarse con la gente. Sin embargo, la velocidad a la que progresa la enfermedad es variable de persona a persona hacer generalizaciones imprudente. Hallazgos post mortem muestran depósitos de proteínas, llamados placas amiloides y los ovillos de tau, en el cerebro, particularmente en la corteza y el hipocampo. Como se desarrolla la enfermedad, las concentraciones de transmisores químicos esenciales en el cerebro, tales como la acetilcolina, se reducen y los vasos sanguíneos en el cerebro también están dañados.

Uno de los problemas para encontrar un tratamiento efectivo para la enfermedad de Alzheimer o la reducción de sus síntomas es la falta de fondos disponibles que se redujo significativamente en comparación con los fondos disponibles para la investigación de las causas y el tratamiento de cáncer y enfermedades del corazón.

Hay varias formas de tratamiento para la enfermedad de Alzheimer, no todos los cuales implican el tratamiento de drogas. Las terapias naturales y cambios en la dieta se cree que retrasar la progresión de los síntomas y en la autoayuda ahora se reconoce como jugar una parte. Los tratamientos con fármacos pueden reducir los síntomas; inhibidores de la colinesterasa, como el donepezil (Aricept), galantamina (Reminyl) y la rivastigmina (Exelon) son los más frecuentemente prescritos. Otro medicamento, la memantina (Ebixa), bloques de un mensajero químico llamado ácido glutámico que se libera cuando las células del cerebro se dañan. Ebixa está diseñado para proteger el cerebro bloqueando la liberación de ácido glutámico.

Uno de los problemas para encontrar un tratamiento efectivo para la enfermedad de Alzheimer o la reducción de sus síntomas es la falta de fondos disponibles que se redujo significativamente en comparación con los fondos disponibles para la investigación de las causas y el tratamiento de cáncer y enfermedades del corazón. La investigación ha demostrado que el daño de las células nerviosas en la retina se correlaciona con el daño de las células nerviosas en el cerebro y este hecho podría ser utilizado como un indicador de las primeras etapas de la enfermedad de Alzheimer. Esto podría conducir a un tratamiento más temprano antes de que se ha hecho el daño a largo plazo en el cerebro.